No alteres su inocencia
El proyecto
No estamos enfocados a una organización en concreto, como personas nos hemos dado cuenta de una gran carencia en la sociedad relativa a la forma de pensar cotidiana. Comúnmente se utilizan formas de expresión que catalogaríamos como “normales” cuando en realidad ejerce una diferencia y posible discriminación sobre los demás.
El motivo
Ante este problema, tan frecuente y sutil en nuestros días que llega a pasar desapercibido, tenemos la intención de abrir los ojos tanto a aquellos que padecen alguna discapacidad como aquellos que no. Todos somos víctimas de nuestros propios prejuicios, y somos quienes tenemos que luchar contra ellos.
Este proyecto nace desde el más puro recuerdo de una niña, que ante la discriminación y las ofensas que recibía una amiga suya con Síndrome de Down, le preguntó inocentemente a su madre la causa de esas burlas. Con esto queremos demostrar que las diferencias no están en la mente de los niños, sino que los adultos, con comentarios perceptiblemente sin maldad, pueden afectar a su juicio, e incluso en ocasiones, hacerlo de forma negativa.
Problema de comunicación
Según la tesis realizada por María Beltrán García, directora pedagoga, las personas mayores de veinte años tienen una actitud más predispuesta a incurrir en prejuicios hacia estos grupos. Sin embargo, aún siendo más adultos o en el rol de padres, siguen haciendo esa distinción (sin pretensión de ofender) hacia este colectivo, provocando un visión distorsionada en los niños, que debido a su inocencia no perciben esas diferencias.
Público objetivo
El target al que nos queremos dirigir son los adultos de entre 30 - 55 años. Este público está acostumbrado a este tipo de comentarios discriminatorios muy sutiles. No obstante, también queremos dirigirlo a los padres cuyos hijos pertenezcan y no pertenezcan a este colectivo. Los primeros debido a que tienen que ser conscientes y han de evitar la sobreprotección, al fin y al cabo sus hijos deben aprender a valerse por sí mismos, y esta sobreprotección sería una barrera en el aprendizaje; y los segundos, ya que queremos que se conciencien de la normalidad del asunto, dado que en realidad el problema lo acentúa su mente adulta.
Objetivos
- Incitar a la igualdad no solo para el colectivo con Síndrome de Down, sino para todos los que puedan verse afectados ante este tipo de comentarios.
- Concienciar a la población adulta de la sensibilidad de los niños.
- Dar visibilidad al problema que constituyen los prejuicios en la sociedad.